* Mientras Angie Estefanía Mercado intenta distanciarse de Beristain, la propia Laura se mantiene firme y contestataria en redes sociales
* Jorge Portilla Mánica surge, una vez más, como el estandarte de la ineptitud
* Pedro Joaquín y Perla Tun han decidido unir sus catastróficas gestiones en un intento desesperado por retomar el control de Cozumel
Por Joaquín Quiroz Cervantes
Y arrancaron las campañas para las alcaldías y diputaciones locales, marcando el inicio de una temporada política que promete ser tan intensa como controversial, especialmente en Solidaridad, Quintana Roo.
Aquí, la figura de Laura Beristain Navarrete se cierne grande y problemática sobre el paisaje electoral. Conocida por muchos como la peor presidenta municipal que ha tenido Solidaridad, Beristain se convierte en el centro de una serie de debates y conflictos que podrían definir el futuro inmediato de la región.
Laura Beristain, quien en su momento lideró Playa del Carmen bajo la bandera de Morena, ha sido artífice de numerosas controversias, que van desde acusaciones de desfalcos y saqueos hasta una gestión de seguridad ampliamente criticada. Esta herencia problemática hace que su presencia en la política actual sea una espina en el costado de Morena, justo cuando intenta limpiar su imagen y proyectar una nueva visión para Solidaridad.
En un giro irónico, mientras Angie Estefanía Mercado, candidata de la coalición Verde, PT y Morena, intenta distanciarse de Beristain, la propia Laura se mantiene firme y contestataria en redes sociales.
Rechazada por su compañera de partido, Beristain no se amilana y responde con la vehemencia típica de alguien acostumbrado a los focos del escándalo y la polémica. Este enfrentamiento no sólo revela las fracturas internas de Morena, sino también el desafío de manejar las repercusiones de liderazgos anteriores mientras se busca avanzar hacia objetivos electorales más amplios.
El escenario ideal para muchos dentro de Morena hubiera sido, probablemente, enviar a Beristain a una especie de exilio político interno durante estas elecciones, dado que su nombre se ha convertido en sinónimo de los peores excesos del partido en la región.
Sin embargo, lejos de mantener un bajo perfil, Beristain se impone en la dinámica de la campaña desde el primer día, influyendo y, posiblemente, distorsionando la estrategia electoral de su partido.
El desfile de desencuentros no se detiene en Laura. La presencia de sus hermanos, Luz María y Juan Carlos, también conocidos por sus propias cuotas de controversia, augura más desafíos para un partido que intenta presentarse como la vanguardia de la transformación política en México.
Este triado familiar no sólo personifica los retos de gobernanza que han enfrentado, también simboliza la lucha interna entre el pasado político y las aspiraciones futuras de Morena.
La figura de Laura Beristain representa un dilema crítico para Morena: ¿Cómo reconciliar el legado de sus figuras más polarizadoras con la necesidad imperiosa de renovación y credibilidad ante los votantes? La respuesta a esta pregunta podría muy bien determinar el éxito o fracaso de Morena en Solidaridad. Así, mientras las campañas se desarrollan, todos los ojos estarán puestos en cómo este partido maneja la sombra alargada de sus propios fantasmas políticos.
Jorge Portilla Mánica y su enésima carrera hacia el fracaso
En una escena política que se antoja más como un circo de mediocridades que como un bastión de liderazgo visionario, Jorge Portilla Mánica surge, una vez más, como el estandarte de la ineptitud. Su arranque de campaña en Tulum no es nada menos que un espectáculo de pena ajena, un presagio claro de la histórica derrota que se avecina.
Portilla, a quien sólo el capricho parece mantenerle atado a la política, enfrenta la realidad con una debilidad alarmante. Su presencia en el servicio público, desde la creación del municipio de Tulum, ha sido una concesión vergonzosa a su status de empresario acaudalado, no a su inexistente talento político o empresarial.
Observando su trayectoria, es difícil encontrar algún momento en el que este pretendido servidor público haya dejado una marca de competencia. Ya sea como director de Turismo, de Desarrollo Urbano o como secretario general del ayuntamiento, Portilla ha demostrado una ineptitud crónica y una torpeza inigualable. Resulta irónico que ahora se atreva a criticar la gestión de un ayuntamiento del cual él ha sido cómplice durante todas sus administraciones.
La incompetencia de Portilla alcanzó nuevas alturas durante su tiempo como titular de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SINTRA), donde incluso Carlos Joaquín Chespirito, su mentor y jefe político, se vio obligado a destituirlo ante su flagrante incapacidad para manejar siquiera lo más básico de la administración pública.
Hoy, este perpetuo coleccionista de fracasos se lanza temerariamente a otra campaña destinada al desastre. Si Portilla es el líder de este lamentable esfuerzo, no cabe esperar nada bueno del resto del equipo. Sería más prudente para él dedicarse a disfrutar de la opulenta herencia de su padre, tomar selfies en exóticos destinos y dejar la política a quienes realmente tienen algo que ofrecer a Tulum, en lugar de continuar haciendo el ridículo en el ámbito público.
La carrera política de Jorge Portilla Mánica es un compendio de fracasos que sólo sirve para reforzar la noción de que ciertas personas deberían permanecer tan alejadas de la política como sea posible. Su próximo fracaso no será una sorpresa para nadie, salvo quizás para él mismo.
La verdadera tragedia aquí no es la inminente derrota de Portilla, sino el tiempo y los recursos que se desperdiciarán en su vano intento por obtener un puesto que claramente está más allá de su capacidad de llenar.
La tragicomedia política de Cozumel protagonizada por Pedro Joaquín y Perla Tun
En la farsa trágica que encabezan Pedro Joaquín y Perla Tun han decidido unir sus catastróficas gestiones en un intento desesperado por retomar el control de Cozumel. Este amasiato político no es más que una tragicomedia que revela la vorágine de incompetencia y la sed insaciable de poder de ambos personajes.
Pedro Joaquín, conocido en los círculos políticos como el “princeso devaluado”, ha demostrado con creces su ineptitud y torpeza. Bajo su “liderazgo”, Cozumel ha experimentado algunos de los peores períodos de inseguridad y desgobierno.
Hoy, este aprendiz de salvador pretende resurgir como el héroe que la isla necesita, una ironía tan grande que incluso el espíritu de don Nassim Joaquín podría estar revolcándose ante el lamentable espectáculo ofrecido por su nieto.
Por otro lado, Perla Tun, conocida como “la madre de la crisis”, en su tiempo criticó ferozmente a los Joaquín, tildándolos a él y su parentela de “ladrones de poca monta”, mientras ella misma se llenaba los bolsillos como munícipe.
Ahora, en un acto de hipocresía sin par, se presenta como la coprotagonista en esta cruzada por la “paz y el orden”, cuando en realidad, es parte fundamental del desorden y el declive que ha sufrido Cozumel.
La unión de estas dos figuras, apodadas despectivamente como el dúo “PP” (Princeso Pedro y Perlita), es un chiste que se cuenta solo. Se postulan como la solución a los problemas que ellos mismos exacerbaron, una estrategia que sólo podría convencer a quienes han olvidado su nefasta historia reciente.
Frente a ellos, figuras como Jose Luis Chacón y Renán Sánchez, de la 4T, deben estar frotándose las manos, anticipando una campaña que más que un desafío político, será un entretenimiento. El camino para la 4T parece despejado para pasarles encima a estos dos personajes que más parecen sacados de una comedia de errores que de la seria arena política.
Cozumel se enfrenta a una elección que podría determinar si finalmente se libra de sus peores demonios o si, por el contrario, decide continuar bajo el yugo de dos de los más grandes artífices de su miseria. Esperemos que la memoria de los cozumeleños sea lo suficientemente larga para recordar quiénes son realmente el “Princeso” y “Perlita”, y actúen en consecuencia para evitar más capítulos de esta desgarradora tragicomedia política.
Y recuerden… esto es sólo para informad@s, si ustedes no estuvieran ahí leyendo yo no estaría aquí escribiendo, y si ser Malix el Huso Horario, el Whatsapp, el Facebook, X, la CFE, López, el Covid19, los troles y envidiosos nos lo permiten, nos leemos pronto, Dios mediante, pero que sea XLaLibre.
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