Por Joaquín Quiroz.
En el complejo mundo de la política, destacar y hacer una diferencia real no es una tarea sencilla. Sin embargo, hay líderes que logran destacar por su dedicación, trabajo legislativo y compromiso con su comunidad.
Uno de esos ejemplos es la diputada federal por el distrito 02 con cabecera en Chetumal, Anahí González Hernández, quien no solo ha demostrado su labor legislativa en San Lázaro, sino que también se ha convertido en una parte preponderante del equipo de la gobernadora Mara Lezama y de Claudia Sheinbaum, la favorita del presidente López para relevarlo.
Anahí González Hernández ha sido un elemento fundamental y vanguardista dentro del exitoso partido político MORENA. No solo es fundadora del partido, sino que también ha ocupado cargos directivos en su estructura.
En su rol de diputada federal, ha presentado diversas iniciativas a favor no solo del sur de Quintana Roo, sino del estado en su conjunto. Ha abogado por temas de gran relevancia social, como la ley que penaliza a quienes derraman ácido en mujeres y la promoción de la llamada ley Olimpia entre los mas recientes.
La labor de Anahí González Hernández en el Congreso ha sido notable y dista mucho de ser una mera presencia decorativa. Su trabajo ha sido activo y efectivo, coordinando los procesos de entrega-recepción entre el gobierno estatal anterior y el actual. Su incansable dedicación y compromiso con el servicio público han dejado claro que no es una política de adorno, sino una verdadera representante de la gente.
El futuro político de Anahí González Hernández está lleno de posibilidades. Su destacada trayectoria le ofrece diversos caminos y opciones, entre ellos, buscar la alcaldía de Benito Juárez, donde tiene amplias posibilidades, repetir como diputada federal o aspirar a ser senadora de la República. Su perfil como integrante del marismo y su conexión con el partido MORENA la convierten en una figura política con potencial y bastante por ofrecer.
La amplia votación obtenida por Anahí González Hernández en 2021, con casi 80,000 votos en el sur del estado, dejó a sus contendientes sorprendidos y demostró su fuerza como líder política. Sus resultados electorales aplastantes dejaron atrás a leyendas políticas como el extinto villanuevismo con apenas 6 mil votos para Carlos Villanueva Tenorio, y al candidato priista y del gobernador Carlos Joaquín, José Alberto Alonso Ovando, cuya votación fue mediocre de apenas 12 mil sufragios en comparación, con lo obtenido por Anahí.
Es sorprendente que algunas voces descalifiquen a Anahí González Hernández sin fundamentos sólidos. Las críticas basadas en que su lugar de nacimiento y residencia es decir Cancún, resultan cómicas, ya que ella representa al sur y al estado de Quintana Roo en San Lázaro.
Es aún más risible considerar que aquellos diputados y diputadas originarios de Chetumal, por ese simple hecho iban a trascender y a hacer algo por su terruño al cual no le aportaron algo, ni no lograron destacar en su labor legislativa y están prácticamente olvidados en la política.
Tales como Patricia Palma, Arlet Mólgora, Raymundo King, Luis García Silva, Rosario Ortíz Yeladaqui. En contraste, Anahí González Hernández tiene un brillante futuro político por delante y ha demostrado su compromiso con la gente y su capacidad para generar resultados.
Donde su trabajo en favor de la sociedad, su respaldo electoral sólido y su futuro político prometedor la convierten en una líder con mucho por dar. Es importante reconocer la dedicación de Anahí y sus resultados, dejando de lado descalificaciones infundadas y localismos absurdos que no aportan nada positivo al debate político, lo importante es servir a esta entidad y quererla, no donde se nació.
DE PRESIDENTE DEL TJA A PEPENADOR EN HORAS DE OFICINA; JESÚS ANTONO VILLALOBOS CARRILLO.
Seguramente el trabajo dentro del Tribunal de Justicia Administrativa marcha al cien, no hay rezago alguno ya que le sobra tiempo a su presidente Jesús Antonio Villalobos Carrillo, de andar de pepenador, o no sabemos cuál es el enfoque que le está dando a su labor.
En primer lugar, se destaca la rápida obtención de los títulos de maestría y doctorado por parte del presidente del tribunal. Aunque no se puede desacreditar su dedicación académica, es válido cuestionar la procedencia de la universidad en la que los obtuvo. La duda sobre su origen pone en tela de juicio la calidad de la educación recibida y, por consiguiente, la solidez de los conocimientos adquiridos, ya que en 2023 obtuvo grado de Maestro y de Doctor en el primer trimestre del año.
Sin embargo, lo más preocupante es la aparente falta de enfoque en las responsabilidades propias de su cargo. En lugar de dedicar su tiempo a las tareas administrativas, en las que se espera una eficiencia y celeridad ejemplares, Villalobos Carrillo ha decidido enfocarse en actividades ajenas al ámbito de la justicia administrativa. En particular, ha liderado iniciativas de limpieza en la bahía de Chetumal y algunas calles, recolectando basura e involucrando a los empleados a su cargo en estas labores.
Si bien la participación en acciones comunitarias puede ser valiosa, es necesario preguntarse si esta es la función principal del presidente de un tribunal de Justicia Administrativa, por cierto cuestionada su asención al cargo, ya que no contaba con el tiempo necesario para estar separado del cargo, y fue un regalo de su padrino Carlos Joaquín González y el esbirro de este el olvidado diputado panista Lorenzo Martínez Arcila.
Al parecer, la visión de Villalobos Carrillo se ha desviado hacia un enfoque más cercano a la “pepena” que a la política. Estas actividades, aunque loable en sí mismas, distraen la atención y los recursos de un órgano que debería estar plenamente comprometido con su misión principal: impartir justicia administrativa.
Además, es crucial considerar el impacto en los empleados del tribunal, es evidente que se les ha asignado tareas ajenas a sus funciones habituales. Esto plantea interrogantes sobre la eficiencia y la equidad en la distribución del trabajo dentro de la institución. ¿Se están cumpliendo las metas y objetivos del tribunal mientras los empleados desvían su atención a labores de limpieza?
La situación en el Tribunal de Justicia Administrativa plantea dudas sobre la gestión y el enfoque del presidente, Jesús Antonio Villalobos Carrillo, su participación en actividades ajenas a la administración de justicia genera preocupación sobre la efectividad y la dedicación que se espera de alguien que encabece una importante instancia. Así las cosas en este organismo autónomo.
Y recuerden… Esto es Sólo para Informad@s, si ustedes no estuvieran ahí leyendo yo no estaría aquí escribiendo, y si ser Malix el Huso Horario, el WhatsApp, el Facebook, Twitter, la CFE, López, el Covid19, los troles y envidiosos nos lo permiten nos leemos pronto Dios mediante pero que sea Xlalibre
