Por Miriam Chan
“Las doradas” de Mara además de carecer de actitud de servicio son poco comprometidas con la “jefa de jefas”
“Aquellas que cuando deben avanzar no lo hacen, y aquellas que cuando deben retirarse no lo hacen, son decapitadas” (Sun Tzu)
A 9 meses de la administración de la primera gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama Espinosa, mujer que trabaja 24/7, deberá tomar decisiones importantes respecto a su gabinete, ya que lamentablemente los miembros de dicho gobierno no tienen el mismo compromiso que ella, y como dice Sun Tzu en El Arte de la Guerra “por muy talentoso que sea el oficial, si es desobediente deberá ser decapitado” (en este caso decapitada).
Salta a la vista el nulo compromiso y la ineficiencia de varias de las secretarias de estado; no les importa que la “jefa de jefas” trabaje los 365 días del año, y un claro ejemplo es la flamante titular de la secretaria de gobierno, Cristina Torres Gómez, a quien definitivamente le ha quedado muy grande el puesto, ya que lejos de resolver los problemas de estado, se limita a minimizar los hechos que ocurren en la geografía estatal principalmente en los temas de seguridad.
Además de no dar importancia a los hechos violentos que ocurren en la entidad, como levantones disfrazados de intentos de robo frustrados (claro, esto según Cristina Torres), la secretaria de gobierno encargada de las políticas públicas, carece de estrategias para atender posibles focos rojos antes de que estos revienten y afecten a terceros, como ocurre con las tomas y cierres de carreteras federales por parte de habitantes inconformes, quienes suelen advertir de las medidas a tomar, aunque a la autoridad parece que le es intrascendente.
Otra de las funcionarias que ni pinta ni da color en la actual administración, y que se pasa por el arco del triunfo la vocación de cuarta transformación, que establece se fomente la transparencia y el combate a la corrupción, es Reyna Valdivia Arceo Rosado, titular de la secretaría de la Contraloría, quien en 9 meses no ha dado resultados respecto a los expedientes de la administración de Carlos Joaquín González, de la cual se detectaron diversas anomalías e irregularidades en todas las dependencia y organismos descentralizados, pero Arceo Rosado mantiene una postura hermética y solo se limita a decir que es para no “viciar” los procesos (todo parece indicar que ya hubo un acuerdo y darán carpetazo al asunto).
Que decir de Linda Saray Cobos Castro, titular de la Decretaría de desarrollo Agropecuario Rural y Pesca (Sedarpe), otra funcionaria sin actitud de servicio, quien únicamente se la pasa firmando convenios de colaboración para proyectos de investigación científica que poco aportan al sector y la transformación del campo quintanarroense.
Con mas penas que glorias y envuelta en diversas situaciones “incomodas”, como la desaparición de un curvato en la ciudad capital, Lilian Jesús Villanueva Chan, directora del Instituto de la Cultura y las Artes, ha demostrado nulos conocimientos en el tema, pero además insulta a los verdaderos artistas quintanarroenses al organizar un ciclo de conferencias con personajes como Manuel Villanueva Enríquez (padre de la funcionaria), Rosario Ortiz Yeladaquí y Luis García Silva entre otros, quienes nada tienen que ver con temas culturales pero fueron los ponentes que encabezaron el ciclo de conferencias por el 125 aniversario de Chetumal. Alguien le debe de decir a la ex reina de belleza, que la cultura es más que una fatua pasarela de ex funcionarios y familiares.
Otras funcionarias como Irazú Sarabia May, titular de la Secretaría de Obras Públicas, esta mas concentrada en la disputa del 2024 y su aspiración a la presidencia municipal de Othón P. Blanco, que de paso la pone en clara rivalidad con Yensunni Martínez, actual presidenta municipal, a grado tal de únicamente centrar recursos y esfuerzos para el sur del estado con sus programas de bacheo y rehabilitación de parques en lugar de distribuirlos por toda la geografía estatal.
El 25 de septiembre de 2022 cuando la primera mujer gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama Espinosa dio a conocer a los miembros de su gabinete destacó que, “en la administración de Marza Lezama no hay tiempo que perder cuando la prioridad es el bienestar de los quintanarroenses, y en ese objetivo se ha pedido a los servidores y servidoras que concentren sus esfuerzos”. Todos los integrantes entre las que se encuentran las mujeres antes mencionadas tomaron protesta y se comprometieron a realizar cada una de sus actividades con la vocación de los gobiernos de la 4T que fundamenta la transparencia y el combate a la corrupción, pero hoy, cuando solo han pasado 9 meses, parece que a estas funcionarias se les olvidó la responsabilidad que tienen con su jefa política y peor aún, con el pueblo quintanarroense.
“Desde el Cristal con el que miro”, las “doradas” de Mara Lezama carecen de actitud de servicio, faltan a los principios de la cuarta transformación y se enfocan únicamente en la simulación y apariencia, aprovechándose de que la “jefa de jefas” sea una mujer que trabaja 24/7, y alguien debería decirles a estas mujeres funcionarias que su salario lo paga el pueblo, que dejen de fingir y se pongan a trabajar tal como lo hace gobernadora.
Nos leemos la próxima semana con la evaluación de los hombres del gabinete.
Correo damim5@live.com.mx