Por Joaquín Quiroz
Mis cinco lectores, sin duda el oportunismo parece estar a la orden del día en el partido Verde Ecologista de México, y cómo este partido ha tratado de reinventarse y posicionarse como un defensor de la 4T en Quintana Roo. Pero, no olvidemos que la gobernadora Mara Lezama es una figura que proviene de MORENA, no del partido del tucán.
El partido Verde en Quintana Roo ha intentado vendernos la idea de que son el vivo reflejo de la 4T, pero no nos engañemos, no son más que un partido oportunista que busca sacar ventaja de las circunstancias políticas.
Su relación con la gobernadora Mara Lezama, quien proviene de MORENA, es un ejemplo claro de esta estrategia oportunista.
En las elecciones de 2018, el Verde iba aliado con el PRI, y llevaba como candidato a Pablo Bustamante por Benito Juárez y a Mara Lezama por MORENA. En esa ocasión, Mara Lezama arrasó en las urnas y se convirtió en la primera edil de Cancún.
Es importante recordar que el Verde entró en forma a Quintana Roo gracias a Félix González Canto, quien permitió que este partido se aliara con el PRI en 2006, ya habían hecho sus pininos de atracar cual piratas, con Juan Ignacio García Zalvidea y con Marciano Toledo.
Sin embargo, la verdadera puerta de entrada del Verde a Quintana Roo se abrió durante el gobierno de Roberto Borge Angulo. Borge Angulo, sintiéndose poco apreciado en el PRI nacional, buscó una puerta de interlocución con el presidente Peña Nieto.
En ese momento, cedió el control de Quintana Roo al llamado “niño verde”, Jorge Emilio González. Incluso, cuando Jorge Emilio González se convirtió en senador en 2012, dejó a su suplente, un completo desconocido, en su lugar.
En 2018, el Verde se alió nuevamente con el PRI y José Antonio Meade, pero cuando el PRI fue derrotado en las urnas y varios diputados federales verdes migraron a MORENA, el partido rápidamente se autodenominó defensor de la 4T y buscó una alianza con MORENA en las elecciones federales de 2021.
En la actualidad, el Verde en Quintana Roo ha logrado adueñarse de estructuras que antes eran clave para el PRI. Además, han perfeccionado la operación política en el día de las elecciones, lo que les ha permitido aprovechar oportunidades y ganar terreno en el estado.
Sin embargo, debemos recordar que Mara Lezama es la primera Morenista en la entidad y ha sido una de las primeras en representar al partido en Quintana Roo.
A pesar de los intentos del Verde por hacerse pasar por defensores de la 4T, su historia oportunista y sus cambios partidistas no se olvidan fácilmente.
La dirigencia del Verde en Quintana Roo busca construir estructuras con ex priistas y copiar modelos obsoletos que demostraron ser ineficaces en el pasado. Además, están dispuestos a aceptar a todo tipo de personajes en sus filas, desde ex colaboradores de Laura Fernández Piña hasta aquellos que no encontraron espacio en MORENA.
Esta situación ha generado tensiones entre los morenos de pura cepa.
El oportunismo político del Verde en Quintana Roo es un espectáculo que no podemos dejar de observar. Aunque han logrado avanzar en el estado, no debemos olvidar su historia de cambios partidistas y su estrategia de aprovechar las oportunidades políticas que se les presenten. La política es un juego de ajedrez, y en Quintana Roo, todos luchan por sus posiciones y permanencia.
CON MÁS PENA QUE GLORIA: EL TRISTE ADIÓS DE SEGOB DE ERICA CASTILLO, EN BUSCA AHORA DE AVENTURA TAXISTA.
Mis cinco lectores, prepárense para la noticia que sacudió los cimientos políticos de Quintana Roo: Erica Castillo Acosta, esa brillante estrella de la política (¿o deberíamos decir, membrete?) ha decidido abandonar su papel de directora de Gobierno para buscar emociones más emocionantes como taxista. Sí, han leído bien, ¡taxista!
Durante nueve largos meses, Erica Castillo vegetó en la secretaría de gobierno, cobrando su salario como directora de Gobierno. Pero, ¿qué hizo durante ese tiempo? Bueno, eso es un misterio digno de Sherlock Holmes. Algunos podrían argumentar que fue un membrete más en el gobierno de Quintana Roo, y eso sería quedarse corto.
Antes de su papel como directora de Gobierno, Erica Castillo pasó por la política sin pena ni gloria. Fue diputada local y regidora, pero sus acciones pasaron desapercibidas, como un suspiro en medio de una tormenta política.
De hecho, si hay puntos difíciles en la movilidad en Quintana Roo, podríamos atribuirlo en parte a su papel como presidenta de la comisión de Movilidad en la XVI legislatura.
Mientras era diputada, Erica Castillo parecía ser juez y parte en cuestiones de movilidad, y las leyes relacionadas con servicios como UBER fueron obstaculizadas, dejando a Quintana Roo en la Edad de Piedra de la movilidad.
Y, por supuesto, no podemos olvidar la violencia y el caos que han caracterizado a las autoridades omisas, como la ahora exfuncionaria.
Pero aquí viene la parte realmente emocionante: Erica Castillo ha decidido abandonar su cargo de membrete en busca de un nuevo horizonte, como secretaria general del Síndicato de Taxistas Andrés Quintana Roo. ¡Un giro sorprendente para una política que ha pasado desapercibida durante tanto tiempo!
Sin embargo, Heraldos de Xlalibre nos dicen que las posibilidades de que Erica Castillo tenga éxito en su nueva aventura son prácticamente nulas. El repudio que ha acumulado entre los taxistas es alto, y su falta de experiencia en el gremio es evidente.
Su único logro notable es ser hija y tocaya de un ex secretario general, y eso no parece ser suficiente.
Sabedora de su inminente derrota, Erica Castillo parece estar apostando por negociar posiciones o ejercer presiones para asegurarse una posición en el futuro. Después de todo, ¿quién necesita ser secretaria general de un sindicato de taxistas cuando se puede ser regidora o diputada en otra legislatura?
Erica Castillo se lanza al ruedo en un intento desesperado por figurar en algo, después de haber pasado desapercibida en su papel anterior. Acompañada por personas de dudosa reputación y taxistas no queridos en el gremio, todo parece listo para una derrota anticipada. ¡Qué emoción!
CURVA PELIGROSA…
En medio de la incertidumbre y la controversia que rodea al Tribunal de Justicia Administrativa del estado de Quintana Roo (TJAQRoo), se vislumbra un proceso de renovación que plantea un dilema importante.
Los Magistrados Alfredo Cuéllar Labarthe e Isabel Cecilia González Glennie, quienes han sido señalados como parte de la herencia del exgobernador Carlos Joaquín González, enfrentan la posibilidad de una reelección que genera escepticismo en la opinión pública.
A pesar de que el Magistrado presidente, Jesús Antonio Villalobos Carrillo, el mayor joaquinista en el tribunal ha presentado sus expedientes respaldando su gestión, es tiempo de preguntarnos si es conveniente mantener en sus cargos a quienes podrían estar más preocupados por su reelección que por servir a la entidad.
La ciudadanía debe exigir transparencia y rendición de cuentas en este proceso, y considerar la apertura a nuevos rostros y personajes que puedan aportar una perspectiva fresca y comprometida con el bienestar de Quintana Roo, ya que estos joaquinistas visto está no han sancionado ni por error a los joaquinistas que se fueron y saquearon a la entidad
Por lo que el TJAQroo supuesto órgano “autónomo” es tiempo de que le quiten lo panista y joaquinista y realmente cumpla con su función, la decisión final recae en la Legislatura, y es crucial que se tome con responsabilidad y en beneficio del Estado, y se remueva lo que no sirve y que incluso llegó ahí de forma ilegítima torcierdo las leyes como el mismo magistrado presidente.
Y recuerden… Esto es Sólo para Informad@s, si ustedes no estuvieran ahí leyendo yo no estaría aquí escribiendo, y si ser Malix el Huso Horario, el Whatsapp, el Facebook, Twitter, la CFE, López, el Covid19, los troles y envidiosos nos lo permiten nos leemos pronto Dios mediante pero que sea Xlalibre